La historia del consumo de drogas y la del desarrollo del negocio están llenas de curiosidades, de improbables héroes, de seguras víctimas, de dobles discursos, de falsedades. Por ejemplo, un estereotipo ya instalado nos muestra al narcotraficante, del nivel que Sea, como un latino de bigotes y piel tostada dispuesto a socavar la sociedad capitalista, su víctima