Por el autor de Narcojuniors. Los herederos del poder criminal El ejemplo lo puso su padre y ellos no renegaron. La sangre llamaba.
Se rodearon de los más buscados y, muy pronto, adoptaron su papel. La herencia fue criminal. Saben usar rifles, escopetas y pistolas, pero la ilegalidad es su mejor arma. Son protegidos por ciudadanos atemorizados y por políticos corruptos.