En una palabra: la revolución es hija del progreso del mundo, y ley ineludible de la humanidad; la bola es hija de la ignorancia y castigo inevitable de los pueblos atrasados
¿Existirá en el mundo algún político honesto? No en el México de las Novelas Mexicanas, tetralogía que gira en torno al periodista Juan Quiñones, la eterna corrupción del sistema político, el poder de la prensa y un amor casi imposible. En La bola, primer título de la serie, Juan Quiñones pierde lo más querido a causa de su fortuita participación en una revuelta; demasiado tarde descubre que en el país de las aberraciones él ha sido el único vencido de una lucha en la que todos ganaron. Visionarias en su momento, resistentes al paso del tiempo, las Novelas Mexicanas de Emilio Rabasa exhiben con ingenio e ironía los ardides de una rapaz lucha por el poder; sus personajes, caricaturas del funcionario en turno, nos recuerdan que, en el amor y la política, sin importar la época, no hay escrúpulos que valgan y la gran ciencia es no perder, no caer.