Aunque todas las novelas de Dickens contienen referencias importantes respecto de los tiempos en que ocurre la trama, Historia de dos ciudades tiene una diferencia significativa, pues fue concebida como una novela histórica propiamente dicha; en ella se retrata el mundo europeo de finales del siglo XVIII, y se maneja una argumentación extraordinariamente interesante acerca de los dos modelos de desarrollo social que en aquellos tiempos se presentaban como antagónicos: El de la Revolución industrial inglesa, y el de la Revolución social francesa.