Un cirujano hace una misteriosa visita a domicilio, la enfermera que lo espera dibuja un signo ambiguo en la ventana; el hombre fotografía un suplicio chino, la mujer camina junto al mar… Éstas y otras imágenes conforman el montaje literario de un instante capaz de contener dualidades, memorias propias y ajenas, meditaciones tenaces, sentimientos profundos e imágenes persistentes que también son, tal vez, recuerdos inventados.