Los múltiples esfuerzos de nuestro sistema escolar por mejorar la adquisición de conocimientos y habilidades no han sido suficientes para lograr resultados más deseables. La urgencia del problema en sus distintos ángulos -desde la formación de profesores hasta la elaboración de materiales y de estrategias rigurosa, enfocada en particular a la organización lógico-conceptual y a los procesos de argumentación capaces de culminar en habilidades probadas.