Lin Sukai finalmente alcanza el trono, pero el pueblo no confía en ella y sus alianzas políticas son débiles.
Jovis ha sido nombrado General de la guardia imperial a cargo de la seguridad de Lin y cada vez le resulta más difícil continuar como espía para la rebelión.
Phalue se ha casado con Ranami y ha derrocado al gobernador, pero no será fácil arreglar los problemas provocados durante el gobierno de su padre.