En este proceso aun sin termino claro es la reforma electoral mexicana, pero sobre todo en las escabrosas relaciones entre los medios de comunicación y el mundo político, las elecciones presidenciales de 2006 quedaran como experiencia insoslayable. Allí se manifestaron los excesos, pero también los límites políticos de la propaganda. Allí se pudo advertir la complejidad de factores que definen el ánimo de los ciudadanos cuando deciden su voto…