Uxmal, 1519. La sangre de los guerreros mayas todavía empapa el campo de batalla cuando Malinalli, siendo apenas una niña, es entregada como botín de guerra a las huestes españolas. Inteligente, indómita y decidida a sobrevivir a toda costa, en los siguientes meses aprenderá el idioma de los conquistadores y conseguirá volverse uno de los elementos más respetados e importantes del ejército de Hernán Cortés. ¿Traidora o sobreviviente?.