La medicina forense y la criminalistica coadyuvan de forma importante a conciliar la seguridad pública y el irrestricto respeto a los derechos humanos, aportando a las autoridades encargadas de la procuración de justicia y la administración, así como a las partes procesales, nuevas técnicas y métodos que le permitan conocer la existencia o inexistencia del delito y del sujeto activo del mismo.