El capitán Ahab (Gregory Peck) está al mando de un barco ballenero, el Pequod, un bergantín cuyas cornamusas son de dientes de cachalote y la caña del timón hecha de una mandíbula. Su vida transcurre en el entrepuente y solo sale por las noches. Para la mayoría de la tripulación es sólo un fantasma con una pierna de hueso de ballena, cuyos pasos retumban en la cubierta.