Fidencio Barrenillo (Cantinflas) es un boticario pueblerino en la frontera norte de México que descubre unos antiguos títulos de propiedad de una mina en Arizona, La Veladora, que heredó un fallecido bisabuelo suyo, y decide ir a reclamarla. En el trayecto es capturado por una tribu de apaches y está a punto de ser quemado vivo, pero es visto por uno de los miembros de la tribu, Winona (Gloria Coral) y gracias a que el Gran Jefe Caballo Recostado (Manuel Vergara) tiene dolor de muelas y se entera de que el prisionero lo puede sanar, ordena su liberación con la condición de que lo cure.