Tamsin Lark nunca quiso ser una Saqueadora. Al ser una mortal sin ningún talento mágico, no estaba destinada a colarse en bóvedas ancestrales y competir contra Sagaces y hechiceras por los tesoros ocultos en ellas. Sin embargo, cuando el rufián que tiene por padre adoptivo desaparece sin mediar palabra, no tiene otro modo de mantenerse a sí misma (y a su hermano Cabell) con vida.