Cabeza visible del Grupo de Bloomsbury ?una de las generaciones de intelectuales más brillantes de la cultura británica? y novelista con un aura casi mítica, Virginia Woolf también fue una maestra del ensayo. La frase que da título a este libro, «una mujer necesita dinero y una habitación propia para dedicarse a la literatura», generó gran controversia en su época y se ha malinterpretado hasta la extenuación.