Narrada con la voz de una joven única, esta magnífica novela histórica, situada a finales del siglo XIX en Chile, continúa una portentosa saga familiar que comparte personajes con Hija de la fortuna y La casa de los espíritus, novelas cumbres en la obra de Isabel Allende.
La protagonista, Aurora del Valle, sufre un trauma brutal que determina su carácter y borra de su mente los primeros cinco años de su vida.