El autor de El cuaderno de Noah vuelve a emocionarnos con una historia de amor verdadero, familia y la importancia de encontrar nuestro lugar en el mundo. Tanner ha pasado toda su vida yendo de un lugar a otro, sin pertenecer a ninguna parte. Cuando su abuela, poco antes de morir, revela el nombre y el lugar donde vivía el padre que nunca conoció, decide visitar Asheboro para dejar el pasado atrás y seguir con su vida. Kaitlyn sabe exactamente a donde pertenece.