En 1942, el doctor judío Eddy de Wind se presentó voluntario para trabajar en Westerbork, un campo de tránsito en el este de los Países Bajos donde conoció a Friedel, una joven enfermera. Los dos se enamoraron y se casaron allí. En 1943, fueron deportados a Auschwitz en un tren de mercancías y los separaron, yendo Eddy a parar al barracón 9 y Friedel al 10, en el que se realizaban los experimentos médicos.