El amor se enciende. El caos reina. La magia está prohibida en todos los Reinos del Alba. A los magos se les considera una abominación y se les culpa por la plaga de monstruos que arrasó la tierra veinte años atrás.
Jin Zhara ya tiene suficiente con acatar los caprichos crueles de su madrastra, cuidar de su hermana pequeña ciega y mantener su propia magia bajo control, sin tener que lidiar con los rumores que circulan sobre monstruos en el pantano.