A partir de su verso luminoso, Calderón de la Barca reflexiona sobre los grandes problemas de la condición humana: su dignidad y su miseria, la limitación de sus pasiones, la muerte y la libertad.
La vida es sueño es una de esas pocas obras dramáticas que pueden ser consideradas como la más representativa de su autor y, al mismo tiempo, un verdadero símbolo de la cosmovisión de su época.