Este libro parte de una investigación retrospectiva documental y de observación participante sobre aquellos aspectos históricos, sociales y culturales que han moldeado la percepción simbólica del papel social de la mujer curadora-cuidadora, y la imagen que se le confiere a la enfermera en México, partiendo de la apreciación que se tiene en general de la profesión de enfermería en la sociedad mexicana y de la cual se desprende que la construcción de la imagen simbólica es parte de un proceso histórico social y que los estereotipos positivos o negativos que están presentes en la sociedad, y que aquellos que adquiere los estudiantes de enfermería, se refuerzan al transitar por la carrera y estar en contacto con los campos clínicos.
Se tomó como base del análisis, la perspectiva de la antropología simbólica que estudia a la cultura como un sistema compartido de símbolos y significados que sirven para comunicar ideas y concepciones de acuerdo con un código establecido socialmente, por lo que el interés se centró en la descripción de algunos hechos históricos que repercuten en los aspectos simbólicos de la cultura que conforman un sistema de significados que están alrededor de la enfermería.
Este estudio parte de la idea de que la enfermería, al igual que todas las profesiones, descansa sobre una base sociocultural, que ha sido modelada por las prácticas terapéuticas occidentales centradas en la curación de las enfermedades y el cuidado para recuperar la salud. Es tan antigua como la humanidad como acción femenina de cuidar, pero nueva en su papel de profesión, y que ha sido modelado por la forma de organizar el cuidado de los enfermos en hospitales y de acuerdo con la filosofía de la medicina moderna. Ha adquirido sentido y valor de esas cualidades femeninas que le confiere la sociedad, pero también de los espacios en donde ha sido necesaria para lograr la curación de la enfermedad.
Para dicha empresa fue necesario analizar información sobre la historia de la atención a la salud y de la enfermería en México, pues se partió de la idea de que el desarrollo de los eventos económicos, políticos, culturales y sociales que ocurren en el mundo y en el país, han ido conformando una concepción del deber ser de esta profesión dentro de la sociedad occidental de la cual es parte la sociedad mexicana, y le han conferido a la enfermería, además de una imagen social, el estatus ocupacional que posee actualmente, puesto que en toda comunidad las posiciones sociales son valoradas normativamente en una escala que las sitúa en un orden jerárquico en términos de prestigio o valor social.