La práctica del cuento corto gay no está muy desarrollada en México; Jesús Meza, editor de revistas gays, ha practicado este género donde: trama, desarrollo y desenlace tienen lugar en solo unos renglones, y sin que la lectura pierda su libidinoso encanto, en donde lo erótico y más aún lo pornográfico tienen gran atractivo no solo para la gente gay, sino también para la heterosexual que desea conocer ese otro mundo de una minoría sexual, que no es desconocida en la sociedad.