Tanto los libros como los objetos decorativos forman parte de nuestra vid cotidiana. En los primeros se encuentra nuestra historia y también todo el universo cultural que nos rodea desde la antigüedad hasta nuestros días; en los segundos radico nuestros gusto y son reflejo de nuestra personalidad, poseen un valor material o sentimental; dotan de significado y simbolismo nuestro hogar.