La princesa Eadlyn ha crecido escuchando interminables anécdotas sobre como se conocieron sus padres. Hace veinte años, America Singer entra en la Selección, conquista el corazón del príncipe Maxon, y vivieron felices para siempre. Eadlyn cree que esta historia es demasiado romántica, y no tiene ningún interés en repetirla. Si fuera por ella, no se casara nunca.