La historia de la humanidad adquiere tintes inesperados al revisarla en términos científicos. De haber tenido los conocimientos químicos con los que contamos hoy, las vidas de nuestros antepasados habrían sido muy diferentes. A lo largo de un camino sembrado de empeño intelectual, felices aciertos, errores fructíferos, perseverancia y azar, hemos ido comprendiendo la estructura molecular de aquello que nos rodea.