Ahora que recién comenzamos un nuevo milenio y que la ciencia y tecnología han alcanzado logros espectaculares en muchas áreas, no deja de ser una paradoja que el estudio de la mente siga siendo un espacio incógnito.
En lo relativo al estudio de la mente, abundan las propuestas y los modelos, a veces dentro del mismo marco o paradigma, llegando al punto en que se extienden sin que aparentemente nada pueda frenar su crecimiento.
Cuando el panorama que se ofrece es tan heterogéneo, resulta sumamente difícil intentar responder que es la mente humana.