"En el País de las Brujas estaba terminantemente prohibido ser bueno. Como aquí está terminantemente prohibido ser malo. Quiero decir que todo era igual, pero al revés. Hasta que una vez, nadie sabe cómo ni por qué, nació en aquel país una brujita con ganas de ser señorita... Y pasó todo lo que pasó..."
Así comienza esta obra donde el mundo de las brujas, el humor y la magia del teatro se dan cita para contar una historia diferente.