A través de ocho lecciones, Tomás Melendo realiza un análisis ontológico del amor humano, en el que considera a éste en tanto donación del propio ser. En su estudio filosófico-psicoantropológico, el autor establece que el amor del hombre no sólo culmina con la entrega, sino que también existe en el un impulso a ser amado, porque el que ama merece ser amado, y el deseo de ser correspondido constituye un elemento esencial del verdadero amor.
La persona que ama encuentra en el ser quiero --esposo, amigo, hermano-- el complemento que falta a su propio ser. Sólo logramos acercarnos a la felicidad -afirma- cuando crecemos en valores humanos, y esto sucede en la medida en que amamos y somos amados.
Lo que esencialmente constituye al ser personal es la capacidad de amar, de buscar el bien en sí y el bien del otro en cuanto otro, manifestada y hecha vida en actos amorosos sucesivos y reiterados; es la facultad de querer, la voluntad, donde de alguna manera residen y se contraen el corazón ontológico y las fibras capitales de la persona.
Melendo aborda tambien temas como la amistad, el amor conyugal y el amor en relación con la sexualidad, que seguramente motivarán el interés publico en general y los profesionales de la psicología y las relaciones humanas.