Tal vez lo que está sucediendo es lo siguiente: la literatura de ficción no se ha acabado, lo que está desapareciendo es el lector. ¿Podrá llegar a ocurrir la paradoja de que sea el lector el que se acabe y no el escritor? O sea, ¿Qué la literatura de ficción y la poesía continúen existiendo, aunque los escritores escriban para tres gatos?