Mora, al igual que muchos niños, enfrenta el divorcio de sus papás de la mejor manera posible. Ella y su hermano como verán a su papá dos fines de semana al mes. Su padre tiene una nueva novia, leah y a mora le parece bien porque su papá está contento. Pero el primer fin de semana de visita en casa de su padre, mora descubre que las sorpresas no han terminado y que estas no siempre son agradables.