Al ser el planeta más rápido de nuestro sistema solar y el más cercano a la Tierra, la Luna ocupa un lugar privilegiado en la astrología. Sus efectos sobre las mareas, el crecimiento de las plantas o el elemento líquido en general son bien conocidos. Símbolo de la infancia, de lo inconsciente y de lo oculto, la Luna nos indica el grado de sensibilidad y de imaginación de una persona.