Leo y Nando San Juan están felices de haber vencido al Chupacabras. Tras despedirse de los insurgentes, y una vez más en el camino hacia Puebla, una nueva misión les impide llegar con su abuela: el Charro Negro se ha llevado el alma de una niña y, para recuperarla, Leo debe cruzar al inframundo y completar una serie de pruebas.