La lógica formal se ocupa de determinar cuándo un argumento es correcto o incorrecto. Desde sus inicios hasta nuestros días, se ha desarrollado como ciencia rigurosa, con un lenguaje técnico elaborado y preciso, pues la utilización que hace del simbolismo le permite evitar las conclusiones y ambigüedades del lenguaje natural.
A la lógica formal, en su actual estado de desarrollo, se le conoce como lógica simbólica o lógica matemática, denominaciones que hacen alusión a su uso sistemático del simbolismo y al parecido de sus procedimientos con la matemática, de la cual, sin embargo, no es una rama o disciplina.
Los conceptos fundamentales de esta ciencia son expuestos con notable claridad y sencillez en la presente obra.