A veces la vida nos pone enfrente desafíos que no esperábamos y la única manera de superarlos es armarnos de valor y no echarnos para atrás. ¿Quién dice que no podemos hacer las cosas? El límite somos nosotras mismas: nuestros sueños llegarán hasta donde queramos. El truco es que no nos dé miedo alcanzar la cima.