En plena época posromántica necesitamos impulsos románticos. Y la geografía, a pesar de los pesares, superada hace decenios la época de los exploradores auténticamente románticos, tiene que seguir siendo romántica. Yi-Fu Tuan defiende la idea de una geografía romántica, de una geografía imaginativa y atrevida, aunque anclada en la realidad, por más que eso pueda parecer contradictorio.