El ser humano ha empleado la ciencia no sólo para conocer y comprender su entorno, sino que también ha hecho de ella una aliada valiosa en el combate contra las enfermedades que lo aquejan. En "El fotón de Asclepio" se expone uno de los ejemplos más ilustrativos de esta alianza: la aplicación del fotón en la prevención, diagnóstico y tratamiento a través de la radiología, la imagen molecular y la radioterapia.