La Filosofía se ha convertido con el tiempo en una asignatura que conviene estudiar para aprobar o en una carrera con la que obtener un título universitario. Sin embargo, no fue éste su objetivo cuando nació en Grecia, sino más bien el de alcanzar una doble meta: desentrañar los secretos del universo, descubriendo su verdad, y aprender a organizar nuestra vida de una forma tan inteligente que logremos vivir bien, ser felices.Conocer la verdad y aprender a ser felices fueron, pues, las dos metas con las que nació el saber filosófico y siguen siéndolo a fines del siglo XX. Por eso decía Epicuro que filosofar es cosa de jóvenes y de viejos: porque "el que dice que aún no es edad de filosofar o que la edad ya pasó es como el que dice que aún no ha llegado el momento oportuno para la felicidad".