El gobernador Earl Long (Paul Newman), de Louisiana, se ha ganado fuertes rivales políticos. El motivo son sus posturas progresistas, a favor de la integración y en contra de cualquier clase de racismo, que chocan con la mentalidad cerrada de los 50. Long siempre ha defendido que los negros están tan capacitados como los blancos para cualquier cosa, y además también ha emprendido nuevas formas de hacer campaña que le han granjeado popularidad. Le espera un futuro brillante.