Emily Starr nació con el firme deseo de escribir. Como huérfana en Luna Nueva, escribir le ayudó a afrontar los difíciles tiempos de soledad.
Pero ahora que todos sus amigos se van a la escuela secundaria, en las cercanías de Shrewsbury, su severa y chapada a la antigua tía Elizabeth sólo la dejará ir si promete abandonar esa absurda manía de la escritura.