La contracultura en México se desplaza entre varios géneros, cubriendo los grandes movimientos y las manifestaciones contraculturales más importantes que ha tenido nuestro país, tales como los pachucos, los existencialistas, las pandillas juveniles o el rocanrol. En esta obra alucinante, el autor también da cuenta de las expresiones juveniles que han incidido en la música, la literatura, el teatro, el cine, la gráfica, la televisión y las publicaciones.