Para salvar el reino y su amor, las chicas de papel y de fuego tendrán que darlo todo.
Pero la guerra ya se ha desatado.
El Palacio Escondido es el último lugar en el que a Lei le gustaría estar. Como prisionera, el Rey Demonio la utiliza como un recordatorio constante de que la guerra se aproxima. Y de que él está dispuesto a todo con tal de ganar.
Pero Lei hace tiempo aprendió que el Papel no es tan frágil como parece, y hará incluso lo imposible para destruir el reino desde dentro.
Al otro lado de los muros del palacio, Wren está desesperada por rescatar a la chica que ama, al tiempo que se enfrenta a los terrores más atroces de la guerra. Mientras se abre paso por Ikhara, Wren empieza a cuestionarse qué significa realmente hacer un sacrificio por el bien común y deberá decidir hasta dónde está dispuesta a llegar.