Sabedor de que son los instintos primarios los que gobiernan las acciones, y que las pretensiones de disfrazarlos de principios no son más que una hipócrita ilusión, los cuentos de Rubem Fonseca ponen en evidencia los puntos en común entre sus protagonistas y quienes usan las caretas como excusa.
Los veintinueve relatos reunidos en Calibre 22 son un repertorio de estas situaciones, en las que gente aparentemente ordinaria recurre a ideas de venganza ante la ausencia de una justicia verdadera que limite los abusos de los pequeños tiranos de todos los días.