El título de esta obra, extraído de una novela de anticipación gótica, da la impresión de ser una ratificación de algunas visiones apocalípticas que profetizan hecatombes o cataclismos que azotarán a un género humano absorto en la mesurada autocondescendencia de lo fugaz y lo materialista; asimismo parece anquilosar conciencias y voluntades a diestra y siniestra.