A Harry Bosch se le asigna la investigación de un homicidio en la zona sur de Los Ángeles que lo lleva a la tienda Fortune Liquors, cuyo propietario chino ha muerto tras recibir varios disparos en un atraco.
Con la ayuda de miembros de la Unidad de Bandas Asiáticas del departamento, Bosch investiga sin descanso el asesinato y pronto identifica a un sospechoso, un miembro de una tríada de Hong Kong en Los Ángeles.