El dueño de la agencia de detectives donde trabaja Yak es Tonome: un hombre invisible inteligente y amable. Aunque él se haga del todo invisible, Yako, una joven humana invidente, siempre sabe donde encontrarle. Ahora que ambos salen juntos abiertamente, ¿a la inocente Yako no para de latirle el corazón con fuerza por la compañía enriquecedora de Tonome?