Nacer esclavo es un hecho, no un decreto del destino. Y los hechos pueden cambiarse. En el país de Ossaniul existe una fortaleza tan desproporcionada como inaccesible: la Casa Culminante. Sus amos, la noble familia de Aldercrest, reinan sobre un verdadero ejército de esclavos. En lo más bajo del escalafón, el joven Moth realiza las tareas más ingratas y tiene pocas esperanzas de vivir más allá de la infancia.