En Kingsport el viento trae sonidos extraños. Surgen de la misteriosa casa que corona el acantilado. Parecen voces pero no son de este mundo y su chillido estridente pone la piel de gallina. En Innsmouth, en cambio, los propios habitantes dan miedo. Todos son altos, flacos, pálidos… y todos son jóvenes: ¿dónde están los ancianos?