La historia de los últimos trescientos años está plagada de teorías conspirativas que intentan dar una explicación totalizadora de los procesos políticos y sociales. Dentro de ellas, la masonería ocupa un lugar central, tanto negativa como positivamente, siempre relacionando sus conexiones con el poder. Ahora bien, ¿qué hay de cierto en estas explicaciones? ¿son producto de la fantasía o tienen algún basamento real?