Otra vez el diablo es una historia dividida en tres jornadas y un amanecer. Si los milagros no requieren justificación, el amor en cambio sí necesita comprobación. Poesía, ingenio, intuición y vehemencia creadora son los rasgos esenciales en esta obra tan sugestiva y palpitante. Nuestra Natacha plantea el problema de convivencia y de justicia social, referido al aspecto de rehabilitación psicológica y moral de los adolescentes recluidos en un reformatorio.