William Shakespeare (1564-1616), el poeta de Stratfordon-Avon, es quizás el dramaturgo más importante de todos los tiempos. Las notas sobresalientes de su teatro son: su magistral dominio de la técnica teatral, el poder de sus personajes y una probada objetividad, desligada de todo sentimentalismo. Romeo y Julieta es una de las obras más conocidas y peor entendidas.