En un tiempo y un mundo dominado por el fuego, la espada y la traición, el joven Uhtred se enfrenta a un dilema: luchar al lado de los vikingos daneses entre los que se ha educado o hacerlo al lado del rey Alfredo el Grande de Wessex, por quien no siente simpatía alguna, debido a su forma de imponer el cristianismo entre sus seguidores.